top of page

Líquido de la masa madre: lo que nunca te contaron



¡Gluten morgen a todos!


La consulta que más recibo es: “¿Qué es ese líquido que se formó sobre la masa madre? ¿Se echó a perder? ¿Debo comenzar de nuevo?” ¡Nooo! Esa masa está viva. Aquí te cuento qué es, por qué se forma y qué hacer con ese misterioso líquido.


El líquido que ves es súper normal que se forme asi que ¡tranquilo! Además, está protegiendo tu masa madre. Lo que hay que hacer es refrescarla. A continuación, te cuento cómo.


Primero, reservar el líquido que se formó en un recipiente. Luego, con la masa madre sola, sin ningún líquido, hay que alimentarla. ¿Cómo? Con harina y agua, y, como siempre, las medidas son A OJO. Lo que buscamos es conseguir la textura tipo papilla de la masa madre.


#GlutenTip: si la masa madre no la usas hace tiempo, sácale una pequeña parte ─antes de refrescarla─ para darle más fuerza.


Mezclar bien los ingredientes, así también le entra un poco de aire. Y listo. Masa madre refrescada. Cerrar nuevamente el frasco o recipiente donde tengas a tu masa madre y dejarla descansar a temperatura ambiente (25 °C es el promedio ideal) hasta que crezca.



¿Qué es el líquido que se formó?

Este líquido es lo más parecido que hay a un vinagre de manzana. Si lo huelen, les va a recordar a eso. Aunque no es precisamente un vinagre, es un producto que se puede utilizar para preparar una vinagreta.


¿Qué se puede hacer?

En un cuenco o recipiente, colocar un poquito del líquido (1 cucharada aproximadamente), aceite de oliva (2 cucharadas aproximadamente) y sal. Mezclar bien ¡y la vinagreta está lista para condimentar tus ensaladas!



Fascinante, ¿verdad? Me sorprendo y aprendo todos los días algo nuevo. Y a ti, ¿se te ha generado este misterioso líquido en tu masa madre? ¿Qué has hecho con él? Cuéntame en los comentarios.


Si quieres aprender más sobre la masa madre, y técnicas de amasado y horneado, te invito al curso inicial de Pan de masa madre que he diseñado para ti.


Al finalizarlo, sabrás cómo hacer masa madre, tu propio pan casero ¡y mucho más!


Harina, agua, sal y tiempo son los únicos ingredientes que necesitarás… ¿Te apuntas?

Que la fuerza del gluten te acompañe, Ramón



¡Comparte este artículo!



bottom of page